jueves, 23 de julio de 2009

A fuego lento...¡pero apúrese!

Restaurante "A Fuego Lento" ubicado en la 16 calle 6-17 zona 10, teléfono 23680475 y 23681747.

Estoy finalizando una reunión y todavía tengo tiempo de ir a almorzar. Si me apuro, puedo comer y llegar a mi siguiente reunión a las 2:30pm. Veo el reloj: la 1:10.

¿A dónde puedo ir? Está aquel restaurante fufurufo que no tiene parqueo, y aprovechando que aún estamos en canícula, sería una buena opción. Manejo vertiginosamente por la zona 10 hasta llegar a esa desierta avenida donde cruzo a la izquierda y me encuentro con el restaurante a la mitad de la cuadra. ¡Está cerrado!

¡Cerrado y ya son las 1:17! Todavía tengo tiempo de llegar a un restaurante sin parqueo techado. ¡A Fuego Lento! (en ese momento no me percaté de lo obvio: ¡el término "lento" se encuentra en el nombre del restaurante!).

Di otro par de vueltas en mi vehículo y me estacioné en ese parqueo de piedrín que está a la par de La Estancia, frente "Saúl" (café o restaurante, no recuerdo) y le pregunto al policía "¿hay algún atajo o hay que caminar toda la vuelta para llegar a A Fuego Lento?" "hay que dar la vuelta" me indica.

Así lo hago, y finalmente llego: la 1:25. 45 minutos deberían ser suficientes para comer y llegar a tiempo a mi reunión. Entro al local y me llevo la sorpresa de que es bastante diferente de como lo recordaba. Yo tenía la imagen de un lugar refinado, con sillas altas y acolchonadas, cristalería fina y cubiertos pulidos.

Ahora me encuentro dos ambientes. Uno con muebles de madera y metal, bastante extenso y con un graderío que ahora es macetero en el fondo. Otro, la reminiscencia del lugar afelpado que yo recordaba.

Si como del bufé, será rápido y eficiente. Pero doy la vuelta a la mesa y no encuentro nada atractivo. Me debo resignar a pedir del menú. Busco una mesa en el área de muebles de madera y metal y espero al mesero. Veo rápidamente el menú. Veo que hay un pescado a la Mernier. Le digo al mesero "un robalo a la mernier".

Pasan 10 minutos. Otro mesero llega: "fíjese que no ingresaron su orden y hasta ahorita la pedí, sírvase ensalada de cortesía por favor". ¡En ese momento reparé en que estaba en A Fuego LENTO!! Bueno, qué le voy a hacer. Todavía tengo un poco más de media hora para comer y partir hacia mi reunión. Voy al bar de ensaladas y no veo nada atractivo. Una ensalada waldorf y una capresse parecen lo más aceptable. Me sirvo de las dos y regreso a mi mesa.

Las manzanas de la waldorf están frescas, crujientes y sabrosamente ácidas, pero con un aderezo nada convincente. La capresse es una broma: rodajas de tomate manzano con una liniecita de aderezo de albahaca, casi imperceptible, y un triangulito de queso ¡de rodaja!

Sigo esperando y me llevan mi pescado. Es una loncha blanca, cubierta con champiñones y perejil, una papa al horno y una mini escudilla con espinaca gratinada.  Pruebo las espinacas y están muy buenas... la papa también está bastante mejor de lo que me esperaba.  El pescado por su parte, también está en un punto de cocimiento aceptable.  La decepción, significativa, es que los champiñones son de lata.

No tengo tiempo qué perder.  Tengo que pedir el postre y la cuenta.  Llamo al mesero y le pido un mousse de dulce de caramelo.    Me lo llevan bajo un domo de caramelo, muy interesante presentación.  El mousse, sin embargo, no tiene un aroma convincente.  

Me dan mi cuenta: el plato era bastante más caro que lo que decía el menú.  Reclamo. Me explican que con filete de dorado, me hubieran dado el precio del menú, pero como pedí robalo, me tengo que aguantar el precio más alto.  Bueno, tengo prisa.  Pago y me voy a mi reunión.  Llego a las 2:25pm para enterarme de que...¡la trasladaron para el día siguiente!

Ahh, bueno.  Reflexiono sobre mi almuerzo y concluyo que, a pesar de haberme dado ensalada de cortesía, la comida en A Fuego Lento no me inspira más allá de tres lenguas :P :P :P

4 comentarios:

  1. ja ja ja, que mala suerte que cambiaran tu reunión, pero igual me provocó una carcajada, tus comentarios me distraen siempre y me sacan de mi mundo de estres, y me invitan siempre a conocer nuevos lugares, éxitos, yo.

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  2. Estimado yo, muchas gracias por el comentario. Voy a tener que comer fuera y comentar más seguido para ayudar a más gente a quitarse el estres!

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  3. Siiii!! sigue disfrutando tus comidas fuera y deleitandonos con tus comentarios, buen provecho! yo

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  4. Buena historia... lástima la mala redacción!

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