domingo, 16 de agosto de 2009

Restaurante Pecorino - ¡otra vez!

Ubicado en la 11 calle 3-36 zona 10

Creo que estoy empezando a revisitar varios restaurantes sin terminar de explorar los que aún no conozco, pero a veces se debe al tiempo y las circunstancias. En esta ocasión, afortunadamente las circunstancias me llevaron a revisitar Pecorino.

Inicié mi comida con un carpaccio de lomito. Bien preparado, con virutas de queso y alcaparras, una carne de muy buena calidad, y limón al gusto. Lo disfruté bastante.

En continuación al tema de la carne cruda, el mesero anunció que entre los especiales del día tenía Bistecca Fiorentina ¡el original T-bone de 2 libras! No pude resistirme a este excepcional corte y que ordené, término medio.

El T-bone es todo un espectáculo. Es imponente, a penas cabe en un plato, parece de esos bistecs que come el chucho que sale con Tom y Jerry, o en aquel episodio de "el caldillo" de looney toons. Estaba jugoso, suave, aromático, ¡podía sentir cómo mis arterias se alarmaban con tanta grasa y carne roja!

El espectacular corte venía acompañado de zucchini salteado. Nada particularmente exquisito. Me tuve que conformar.

Mi postre fue una Panna Cotta de vainilla. Definitivamente no es el mejor postre que he probado en Pecorino, pero no estaba mal. Era una especie de budín cremoso, encapsulado en una sutil gelatina, adornado con una retícula de una jalea roja, creo que de bayas.

La consistencia gelatinosa era muy agradable, pero el sabor no era lo suficentemente intenso para mi gusto. Supongo que para quienes prefieran los postres sutiles, será más interesante, pero se tendrán que exponer a la pesada digestión de la crema.

Pecorino no me defraudó. Su cocina, su ambiente y su servicio estuvieron a la altura. Reitero mi calificación anterior de cuatro lenguas :P :P :P :P

3 comentarios:

  1. Por tus recomendaciones, fuimos a Pecorinos a despedir a una querida amiga...

    Carpaccio di carne... x 2 como entradas.

    Osso Bucco, Bisteca Florentina y Camarones Zacapa Centenario... Como platos fuertes.

    Mousses de chocolate y panacota... de postres.

    Delicioso el T-bone... aunque como lo pedí sin siquiera ver la carta, cuando lleguó la cuenta me empezó a saltar el nervio que recorre mi arco cigomatico derecho... pero Y Qué! Qué buen pedazo de carne que vale cada uno de sus 365 quetzalitos...

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  2. Hola, gracias por el comentario. La ventaja del T-bone es que es un trozo de carne de dos libras, por lo que se puede compartir entre dos personas fácilmente, lo que saldría a Q182.50 cada persona, un poco más barato de los 20 euros que pagaría uno en Florencia, pero me alegra mucho que haya valido la pena!

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  3. 365 por un t-bone? Aqui estan todos locos.Nota: en Florencia un mesero cuesta exactamente 10 veces lo que cuesta aqui

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