domingo, 15 de marzo de 2009

Restaurante La Fattoria

Ubicado en la 16 calle 4-68 zona 10, teléfono 23343702.

Este lugar tiene un encanto misterioso. Está ubicado en una casa de mediados del siglo XX cuya estética no termina de ser art deco, ni moderna, ni tradicional, pero resulta tan familiar que hace sentir al visitante inexplicablemente cómodo y confianzudo. Si usted quiere sentirse como en casa, creo que este lugar la va a gustar.

La casa está pintada de un amarillo limón, no muy apetitoso si me preguntan a mí. Pero una vez se traspasa el umbral de la entrada, lo agresivo de ese color se olvida para dar paso a una decoración modesta. Me sentí como entrando a la cocina de la casa de alguna gente rica en los años '60: potente iluminación natural; sillas torneadas, sencillas y comunes; manteles y cortinitas de cuadros y una mesa con antipastos como listos para ser pasados al comedor.

De allí en adelante, todo fue un shock de realidad (¿querías un restaurante casero? ¡pues aquí lo tienes!). Mi orden consistió en unos tortellini rellenos de salmón en salsa de aglio e olio, un carpaccio de lomito (según ellos) y una ensalada caprese. El postre fue un pastel de chiqueadores. Lo acompañé con una copa de vino blanco.

Los tortellini no estaban parejamente cocidos, unos más duros que otros, lo que no es necesariamente malo, pues para mí resulta en un plato más interesante. Lo malo fue el relleno, que no se sentía fresco. El pescado (cuando se sentía) no aportaba más que una nota de falta de frescura. También probé un tortellini con salsa de tres o cinco quesos (no me recuerdo el número exacto) pero no era más que una salsa de crema casera.

El vino me lo sirvieron en una de esas copas como las que teníamos en casa cuando yo era niño: las que algún tío tacaño regaló para alguna boda, de vidrio grueso y cuestionable buen gusto, con capacidad reducida con el objeto de servir algún jerez u otra bebida de la cual se toma poco por su concentración, sin espacio para sentir el buqué.

El carpaccio fue lo más interesante. Definitivamente no era de lomito, sino de algún jamón curado, embullido en aceite, con cebollín picado y (he aquí lo interesante) apio. La ensalada era más para reír que para degustar. No lo digo por el tamaño de la porción, que no estaba mal. Lo digo por que era tan casera pero tan casera, que ni siquiera se tomaron la molestia de usar tomate manzano (o jitomate) sino estaba hecha con el plebeyo tomate ciruelo.

El postre también era muy casero. Un pastel de chiqueadores, emborrachado con algún licor y relleno de chocolate. Casi tan bueno como los que hacía mi madrastra.

Al final la sentencia es clara: La Fattoría es el lugar insuperable de la comida casera, la decoración casera y el servicio casero. Para eso ¡mejor me quedo comiendo en mi casa! Calificación: dos lenguas y media :P :P :p

9 comentarios:

  1. Que interesante que estes comentando de restaurantes de Guatemala, pero pensé que iba a ser de restaurantes de comida guatemalteca, el contenido que estas generando acá le sirve a compañeros extranjeros que por trabajo vienen a Guatemala y comen en restaurantes como los que tu calificas, casi que todos los días (viven de viáticos obviamente un plato de Q250 no es para todos los días)... sería interesante que critiques los que sirven comida guatemalteca, a mi me han recomendado Kacao en la zona viva, yo no he ido pero sirven comida guatemalteca, si te animás y vas espero ver tu crítica por acá... seguiré tu blog porque coincidimos en algunas opiniones, por ejemplo de Tamarindos y(que por cierto yo le daba ménos lenguas unas 3 o 3.5) y Hacienda Real.

    Saludos :D

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  2. Hola, muchas gracias por el comentario, lo tomaremos en cuenta! Muchos saludos,

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  3. Ya somos 2 o mas ??? Hace años cuando dió inicio la Fattoria era solo venta de pasta casera muy buena por cierto y alli me surtía de variedades y yo Les hacia la salsas. En fin, como muchos se viene abajo. Empezaron a comercializarse y la calidad bajó tanto que prefiero cualquier pasta de supermercado barata. La ultima vez compré UNOs tortellini que de relleno era hielo con sabor a congelador no limpiado. El carpaccio es ni mas ni menos que el lomito curado de res que lo venden en Delica para ser precisos porque yo lo hacia y quedaba igual con rodajas de puerro finamente cortadas, apio, alcaparras y parmesano que yo al menos no escatimo en ponerle el suficiente con aceite de oliva y un poco de Jugo de limon. Tienen la receta si a alguien le gusta porque a mi ya no me entusiasma. Tiene razón para mi lo unico bueno que tiene el lugar es la atención de las muchachas que por ser casi unico cliente se desviven por atenderle, se siente uno muy importante. Yo le quitaria lenguas

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  4. Muchas gracias por su comentario. Ojalá La Fattoría recupere su antigua calidad y esmero para regocijo de quienes gustan de la pasta bien hecha. Muchos saludos.

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  5. A travez de una entrevista que le hicieron en elPeriódico me enteré de la exisencia de su Blog. Le agradezco que nos haya visitado y que se haya tomado el tiempo de hacernos una crítica.

    La Fattroria fue fundada en 1986 con la idea de ofrecer productos tradicionales italianos. No somos un restaurante de alta cocina, nuestros platos son los que puede encontrar en una trattoria en cualquier parte de Italia. Nuestra idea es difundir la cultura italiana en Guatemala, y por eso nuestros clientes, en buena parte descendientes italianos, nos han sido fieles durante estos 24 años. Nuestras pastas, salsas y antipastos son hechos por nosotros siguendo métodos tradicionales y seleccionando los más frescos ingredientes.

    Reitero mi agradecimiento por visitarnos, y sepa que siempre que quiera comer una pasta al huevo con una salsa tradicional italiana y auténtico queso Grana Padano lo invito a que piense en nosotros.

    Hasta pronto.

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  6. A mi me parece excelente. Tienen un gran surtido de antipastos, embutidos, quesos, golosinas y vinos italianos. Es el lugar donde se consigue el mejor prosciutto italiano al mejor precio. Por algo es que siempre esta lleno, especialmente a medio día.

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  7. Disculpe Don Gourmet, tengo unas consultas, ¿A que sabe el pescado fresco?, no consumo pescado regularmente.

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  8. Mario: Muchas gracias por su mensaje. Es un honor que usted escriba en este blog, con la caballerosidad que distingue a quien aprecia a sus clientes. La mía es sólo una opinión, que espero enriquecer probando sus sugerencias. Su restaurante, es una institución, de la que estoy seguro, está usted muy orgulloso. Un cordial saludo.

    Anónimo: Muchas gracias por su opinión, que da balance a este blog, para que nuestros lectores se formen su propio criterio.

    Chavita: Los diferentes pescados tienen características propias, es tal vez como las manzanas: todos reconocemos el sabor de la manzana, pero la roja, la verde, la fiji, etc., tienen su propio carácter. Eso sí, cuando no están frescas, su piel no brilla, su carne se vuelve porosa, su aroma es más agrio, se ven resecas, etc. Así pasa con el pescado. es una serie de indicadores los que evidencian si están frescos o no. Hay tres indicadores que son los más fáciles de reconocer: los ojos, que deben verse hidratados y brillantes, la piel, que debe sentirse firme al tacto, y el aroma que debe ser neutro y no como amoníaco. Muchas gracias por la pregunta!

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  9. Hace un par de domingos atras fui a comer a La Fattoria, quede complacido con toda la atencion y la comida, por cierto, las pastas estaban riquisimas, y el gelato un sabor unico!

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